A 46 años del golpe genocida, el gobierno local desplegó una agenda cultural para ratificar su pedido por Memoria, Verdad y Justicia. El intendente Julio Zamora participó de la histórica marcha al ex Astillero Astarsa y rectificó los legajos de empleados municipales, víctimas del terrorismo de Estado.
En el marco de la Semana de la Memoria por la Verdad y la Justicia, el Municipio de Tigre llevó adelante un amplio cronograma de actividades, que incluyó marchas, homenajes a víctimas y otras iniciativas culturales, con el objetivo de volver a alzar la voz y gritar #NuncaMás. Una de las acciones más significativas fue la rectificación de legajos de los ex empleados municipales, víctimas del terrorismo de Estado, Eduardo Ernesto Barbasio y Simón Schumovich, donde figuraban como ‘abandono de servicio y fallecimiento’. Como acción de reparación histórica, queda aclarado que no pudieron continuar con sus tareas debido a que, en el caso de Simón fue asesinado, y en Eduardo fue detenido-desaparecido.
El intendente de Tigre participó de la ceremonia que invitó a reflexionar sobre la reconstrucción de la identidad del distrito y el pasado reciente. Desde el Municipio se recogen las historias de los y las tigrenses víctimas del terrorismo de Estado durante la última dictadura cívico-militar. Tras la recopilación de diversas fuentes, se utiliza como base el Registro Unificado de Víctimas del Terrorismo de Estado (RUVTE), elaborado por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que incorpora testimonios de sobrevivientes y familiares.
El último sábado, el jefe comunal también participó de la histórica marcha al ex Astillero Astarsa. Lo hizo junto a referentes de los Derechos Humanos, ex empleados de la fábrica, familiares de las víctimas y vecinos de la ceremonia, realizada por la Comisión de Memoria, Verdad y Justicia de Zona Norte en la Plaza Canal. Luego, se continuó la conmemoración a los trabajadores desaparecidos por el terrorismo de Estado en el predio donde funcionaba la empresa.
La agenda local también invitó a la comunidad a sumarse a la confección de siluetas por la memoria, seguida del histórico siluetazo, y homenajes a vecinos, víctimas del terrorismo de Estado, como Carlos Boncio y Hugo Rivas. Esto último fue en el marco del programa municipal “Esquinas de la Memoria”, creado mediante una ordenanza en el Honorable Concejo Deliberante. La iniciativa comprende que a través de carteles sean señalizados sus domicilios, lugares donde fueron secuestrados o sitios significativos con datos biográficos y la fecha en que fueron desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar.
El viernes 25 de marzo, Tigre llevó adelante un homenaje a 45 años del asesinato y desaparición del escritor y militante Rodolfo Walsh. Fue con el descubrimiento de una señalética en la Estación Fluvial del distrito, que resalta la importancia de su figura para la comunidad. Luego la actividad continuó en “El Edén”, lugar donde vivió en el Delta, para reflexionar sobre su historia de vida y lucha.
Además, el sábado 26 se realizó la jornada “Arte para la conciencia social” en el Espacio de la Memoria Padre Pancho Soares, Larrea al 500. Fue junto a la Comisión de DDHH Padre Pancho Soares, la APDH Zona Norte y el programa municipal Huella Urbana. Allí, la artista Nora Basilio y jóvenes grafiteros pintaron junto a la comunidad un mural alusivo a la historia del Padre Pancho, su lucha obrera y militante. También hubo una muestra de “Dibujos Urgentes” sobre las audiencias en los juicios de lesa humanidad.
El Municipio de Tigre asumió como política pública un Archivo de la Memoria, que nació de organizaciones y organismos de Derechos Humanos. A través del mismo, se busca enriquecer la memoria colectiva, con la recolección permanente y continua de los sucesos que marcaron a las generaciones contemporáneas a la dictadura y las venideras.
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