Cuidar los recursos del Estado

Respondiendo a las necesidades de los isleños del Delta y de Martín García. La actual gestión de la Dirección Provincial de Islas está trabajando sobre temas primordiales: destronque, dragado, regularización del sistema de transporte fluvial de pasajeros. En Martín García, con la mirada atenta de su director, se están solucionando situaciones muy irregulares.

        En todos los sectores de gestión, la pandemia provocó el retraso de algunas actividades e, incluso, el desplazamiento de otras para atender urgencias. Así pasó con la agenda que tenían en la Dirección Provincial de Islas, pero dado que ya todo está volviendo a la normalidad, han retomado acciones fundamentales: destronque y dragado. “Esto permite la conectividad, permite que los vecinos puedan ir a trabajar, los chicos a estudiar”, señaló Eugenio Liggesmeyer, Director Provincial de Islas.

        “En un lugar del agua están los barcos/ las proas/ los motores/ los obenques/ la manaza ventosa de la vela/ que roba al aire su camino combo” (C.E.U.).

        Y para que no sólo los barcos que inspiran a los poetas, sino también las lanchas colectivo, que trasladan a pobladores y visitantes, empiecen a funcionar mejor “la Universidad Nacional de San Martín está haciendo un estudio, consultando a vecinos y con nuestra asistencia, para poder determinar los recorridos necesarios, extensiones, tipos de lanchas, más económicas, menos contaminantes. Y también se está trabajando sobre la gestión de flota de la SUBE”.

        Para que se pueda realizar la gestión de flota es necesario que haya conectividad, así es posible determinar ubicación, horarios, tiempos de detención, cantidad de pasajeros, cantidad de kilómetros recorridos, exceso de velocidad, es decir que es un rastreo satelital que utiliza cualquier empresa que maneja una flota de vehículos. Permite establecer recorridos rentables y los que no lo son. Respecto a esto, Liggesmeyer expresó que “la rentabilidad existe porque ningún empresario va a tener una empresa que no sea rentable, además en este caso la rentabilidad está dada por el subsidio del Estado”.

        En cuanto a la SUBE, remarcó que está en funcionamiento, “no hace falta que tenga señal, con que tenga energía es suficiente y cuando llega a la estación traslada la información”.

        “El trabajo del hombre/ desde el bote a su casa/ desde los sauceálamos/ desde las injusticias que se hunden y aparecen/ hasta”. (C.E.U.)

Cuidar la salud y el ambiente

        La isla Martín García es el único lugar de Argentina donde no hubo casos de covid. Antes de declararse el aislamiento obligatorio, la ministra María Teresa García desembarcó el equipo de salud y el plan de vacunación se puso al día, ya que en 2019 nadie había sido vacunado. “Se inmunizó a toda la población contra la gripe y contra la neumonía. Creo que por esto no hubo covid acá”, conjeturó Diego Simonetta, director de la isla Martín García.

        El aislamiento permitió corroborar “quién vive realmente en la isla, porque cuando llegamos, parecía que vivían 1000 personas y resulta que son sólo 114 habitantes”, dijo Simonetta.

        Observar las conductas de los isleños y conversar con ellos posibilitó que esta gestión resolviera temas que les complicaba la vida: para hacer trámites de Pami, Ioma, Anses debían ir a La Plata!!

        “Hablamos con la dirección de Ioma, explicamos el problema y automáticamente dieron la orden a los jefes regionales de Tigre y San Fernando para que se atienda a la gente de Martín García en cercanía”. Siguieron trabajando y ahora hay una delegación de Ioma en la isla, los trámites de Anses los hacen en Pacheco y los de Pami, de manera digital. Con asombro, Simonetta señaló: “En 40 años, nadie había reparado en esto”.

        Ahora los isleños ya no malgastan sus horas de vida en viajes hasta La Plata. Y si vienen al continente y necesitan quedarse a dormir, tampoco gastan dinero porque la Dirección hizo un convenio con el Club Hispano para que puedan usar los dormis sin costo.

        Siguiendo el camino señalado por la ex ministra García, salud y educación, ampliaron el equipo de enfermería, el médico ya no falta, se incorporó una médica pediatra que va dos veces por semana y una psicóloga. Además, el hospital tiene luz de manera permanente; se arregló la casa de las enfermeras que no tenían ni agua caliente ni calefacción, pero tenían lindas goteras en el techo.

        Anteriormente, la luz se cortaba en toda la isla a las 10 de la noche, ahora sólo se corta de 3 a 6 de la mañana. Solucionaron la falta de luz de manera muy sencilla: “Sólo con no robarse el combustible. Hoy están los 20.000 litros que se usan por mes y 20.000 litros guardados por si algún día hay un problema extraordinario”, precisó Simonetta.

        Como la isla es una reserva natural, están trabajando para la implementación de energía solar y en este aspecto, Liggesmeyer especificó que “lo primero es el balizamiento solar de la pista de aterrizaje que se hace este mes. El mes próximo empiezan las obras para hacer un parque solar de 5.000 metros cuadrados. La tercera etapa es la reacomodación de los tendidos eléctricos, poner medidores de luz en cada comercio y termotanques solares en las viviendas. Estimamos que para junio del año próximo la obra va a estar terminada, generando un ahorro considerable y mejorando el medio ambiente”. 

Al pan, pan…

        “Algunos creen que es más importante el pan dulce que la isla”, ironizó Simonetta.

        Sin lugar a dudas, tener empleados en negro, está mal; usar vehículos del Estado para negocios particulares, está mal; usar el combustible del Estado para provecho personal, está mal; no pagar el canon correspondiente al comercio en usufructo, está mal; no querer colaborar con la comunidad de ninguna manera, está mal. Por todo esto y muchas cosas más, con respecto a la panadería, el Director Provincial de Islas fue contundente: “La situación es muy irregular. No se quieren atener a las normas que existían antes de que nosotros llegáramos. Debe quedar claro que esta Dirección puede decidir unilateralmente quién continúa o no”.

        Otro dato que se aclaró, es que los negocios de la isla son para quienes viven en la isla y “el panadero, durante la pandemia, vivió en su propiedad de Mercedes y retiraba en Tigre el dinero que le enviaban desde la isla”.

        Los abusos y autoritarismo habían llegado hasta la lancha de la provincia de Buenos Aires que “a una directora de escuela se le ocurrió que sólo era para los docentes y no dejaba cargar mercadería, entonces contrataban otra lancha para la mercadería por $500.000 extras, encima la alquilaban por 4 viajes por mes y hacía sólo uno”. Ahora todos los gastos extras se suprimieron y la lancha de la provincia lleva a los docentes, la mercadería y a todas las personas que van a realizar algún trabajo a la isla. Evidentemente, a la directora no le gustó que le quitaran el privilegio de viajar sola y pidió su pase a San Fernando. Nadie la extraña.

        Los habitantes de la isla valoran los cambios producidos desde el inicio de esta gestión: hay más trabajo; los empleados del Estado dejaron de ser monotributistas para pasar a la planta transitoria además de recibir el equipo de trabajo correspondiente; el Centro Cívico y el Hospital se han puesto en valor y de noche están iluminados; se han gestionado operaciones y tratamientos médicos para pacientes graves; en el invierno tuvieron leña social; el aeródromo tiene su Jefe con título y viviendo en el lugar; las mujeres que fueron intempestivamente desalojadas con sus niños pudieron volver a la isla. “Se está haciendo justicia”, dijo Melany que recogiendo el sentir de muchos habitantes quiso “repudiar todo lo que se dijo contra Diego (Simonetta) y contra Eugenio (Liggesmeyer) y también contra el gobernador que vino acá para recorrer la isla porque le gusta y ese chalet del que hablan siempre fue destinado al gobernador, pero no es la casa de él porque nadie tiene casa propia acá”.

        “Vengo con la memoria de los árboles/ a instalarme en el centro de la cita/ a abrir el ventanal a los amigos/ para que se descalcen y me sigan/ …./ y andar sobre mi angustia y mi optimismo/ que con ello hago siempre mi mochila”. (C.E.U.).

Por Mónica Carinchi

Deja una respuesta