Querido Eleuterio:

Difícil es escribir estas breves líneas, difícil es saber que ya no estás, vos que siempre has estado tan presente en nuestras vidas, como DR., porque el médico siempre era “EL DR”, pero vos siempre fuiste más, fuiste ese médico de familia completo porque eras ese amigo que escuchaba más allá de la descripción de un dolor físico.

Siempre presente, sin días y sin horarios, todos los teléfonos habilitados y también tu casa, honraste tu profesión como debe ser, y esa entrega descuidó tu salud. Siempre vamos a recordar tu atención, esmero, dedicación y contención a nuestros padres. Fue difícil decírselo a papá, para él que nunca existió otro médico, para él no eras su Dr. sino su amigo.

Quedarán también en nuestros recuerdos esas fiestas “pascuas griegas” en tu casa, esa casa tan especial, tan creativa con todo de vos, así las risas, las bromas, las comidas llenas de colores y la “ruptura de huevos” unos con otros, grandes y chicos, nos reímos mucho.

Nunca nos vamos a olvidar de vos y, como aquel tema de Eladia Blázquez, vos sí supiste “Honrar la vida”. Un abrazo grande a todos tus seres queridos y en especial a vos Peke. Con todo nuestro afecto y como decía mamá “gracias por todo”.

Dra. Elisabet Inés Chebez                                                       Dra. Mónica Eugenia Chebez

Abogada                                                                                   Contadora