Después de sufrir y empatar ante Argentinos 1 a 1, Tigre consiguió quedarse en Primera División por el orgullo de sus jugadores y la pasión de la hinchada que acompañó en masa al equipo en La Paternal.

La historia de este último capítulo de nuestro fútbol argentino terminó de la mejor manera para el Club Atlético Tigre. Y que difícil es explicar lo que significa la felicidad cuando no se trata de la consecución de un campeonato o de levantar una copa internacional, la felicidad es cuando, al final de cuentas, el sufrimiento se torna desahogo y las calamidades desaparecen en cuestión de 90 minutos.

Así se vivió la tarde de fútbol (domingo) y corazones latientes, en la que el Matador tuvo sus momentos de zozobra, como cuando en el inicio del partido Pablo Cáceres desvió sobre la línea una pelota que llevaba destino de red. Esa jugada permitió a los hinchas entrar en razón y plantearse que la justa deportiva no iba a ser un trámite; igualmente, a éste Tigre ningún rival le fue complaciente, ya que todos los partidos de este campeonato fueron de lucha y trabajados hasta el final.

Cuando las noticias llegaban desde otras canchas y las orejas de los hinchas se iban agudizando en las radios llegó el primer gol del partido. El delantero de Argentinos Juniors, Nicolás Blandi, apareció solo detrás de todos y definió con el arco vacío tras un centro que provino desde la izquierda. A los 20 minutos el que estaba haciendo mejor las cosas puso la rúbrica también en el resultado.

Tigre, apremiado por el 0-1 en contra, salió un poco más arriba, con la idea de presionar al local, Ramiro Leone comenzó a desplegar su velocidad por la banda izquierda y Gastón Díaz hacía lo propio desde su carril derecho, Esteban González y Román Martínez comenzaron a ser el fiel apoyo que necesitaba Cachete Morales para amigarse con la redonda.

Pasaron 9 minutos del tanto del local, cuando llegó el empate de Román Martínez. El oriundo de Morón capturó la pelota que llegaba del corner ejecutado por Leone, que primero peinó Diego Morales, para que dentro del área chica y de volea, venciera al arquero Ojeda. A esa altura de las circunstancias el empate ya era más acorde a lo que se terminó desarrollando en el primer tiempo.

El segundo tiempo mostró poco. Primero una gran atajada del arquero local a un disparo furibundo de Ramiro Leone entrándole a la carrera, a los 23 minutos, y después un tiro libre de Cachete Morales que besó el palo derecho de Ojeda.

Parecía que las cosas iban a tener un desarrollo más alentador cuando el árbitro, Juan Pablo Pompei, expulsó a Gentiletti pero lo que generó la roja fue un mayor repliegue de los hombres de Troglio en razón de defender el empate. El ingreso de Stracqualursi, por el debutante Ftacla, podría haber significado la carta de gol que Arruabarrena escondía bajo su manga, pero el bueno del 22 no pudo hacer demasiado y sus intentos claudicaban encerrados entre defensores.

El telón se cerró con el empate del Diego Armando Maradona pero los resultados de importancia para el Matador estaban abiertos. Transcurrieron 3 minutos de incertidumbres y plegarias al cielo gris de Buenos Aires hasta que se supo el desenlace de esta historia: River a la promoción, Olimpo salvado y Tigre con credencial renovada para jugar otro año más Primera División.

A esa altura no importaba más nada, las radios volaron al cielo, los celulares se apagaron, ahora las gargantas del hincha participaban, y en el terreno de juego solo quedaban los luchadores, sobrevivientes, de esta última batalla de la temporada, que como toda guerra contó con caídos, malheridos, héroes y patriotas, pero todos en pos de un mismo objetivo: Dejar a Tigre en la máxima categoría del fútbol nacional. Ellos y su gente lo consiguieron.

Fernando Viale

Fotos: Carlos Borgonovo

Volvió a rodar la pelota en el Complejo

Finalmente este jueves volvió a rodar la pelota en las canchas de fútbol5 del Complejo Deportivo del Club. Pese a la intensa lluvia caída entre el miércoles y el jueves hasta el mediodía, el personal del club y de la empresa Forbex trabajaron a destajo para dejar habilitada tal como estaba estipulada la cancha 2. Y fueron los chicos de la Escuelita de fútbol pertenecientes a las categorías 2000 y 2001 quienes estrenaron la nueva cancha de césped sintético de arena y caucho. Luego fue el turno de las más grandes (98-99) quienes luego de los trabajos técnicos disputaron varios encuentros.

Se informa a aquellos socios y/o simpatizantes que las reservas telefónicas de las canchas quedan condicionadas a la entrega de una seña hasta 24 horas antes, en caso contrario se dará de baja la reserva.