Un trámite de escrituración que lleva 27 años provoca un conflicto entre la Universidad de Luján y el Municipio de San Fernando. De manera inesperada, el Municipio de San Fernando fue favorecido con la cesión de las tierras que ocupa desde 1993 la Universidad Nacional de Lujan. Autoridades y estudiantes han iniciado acciones para terminar con el conflicto y poder escriturar.

        Todos los vecinos de San Fernando identifican el predio de Libertador y Almirante Brown con la educación física y el deporte. Efectivamente, el famoso Instituto Nacional de Educación Física (INEF) General Belgrano tiene una larga historia: fundado en 1939, estuvo en sus orígenes destinado exclusivamente a la formación de varones; contaba con la modalidad de internado para facilitar la participación de estudiantes del interior del país, que recibían, además, becas.

        El proceso de transferencia de las instituciones educativas, llevado a cabo durante la década del 90, constituyó un desplazamiento de responsabilidades financieras, educativas y administrativas, desde el nivel nacional hacia las provincias. Fue así que, en 1993, se transfirió el INEF Gral. Belgrano a la Universidad Nacional de Luján (UNLu).

        “En el 93, ni la Municipalidad de San Fernando ni la provincia de Buenos Aires quisieron hacerse cargo del INEF, entonces el predio pasó a la Universidad de Luján bajo la condición de que el Ministerio de Educación de la Nación se encargara de los trámites correspondientes”, explicó Arián Crincoli, presidente del Centro de Estudiantes de la carrera de Educación Física de la UNLu.

        Esos trámites implicaban una subdivisión ya que la Casona del Ministro no formaba parte de la cesión a la Universidad. En 2007 se ratificó el convenio y en años posteriores, la UNLu insistió sobre la cesión definitiva, pero el acto registral de escrituración nunca se pudo llevar a cabo dado que el Municipio de San Fernando reclamaba una deuda de tasas por la Casona.

        El 20 de mayo pasado, el Rector de la UNLu fue advertido por personal de seguridad que el intendente de San Fernando había ingresado al predio en compañía de personal policial. Inmediatamente se prendieron las alarmas, ya que está prohibido por ley que la policía ingrese a una institución universitaria, el Rectorado no fue avisado de dicha visita y, como perlita del gesto, el Municipio informó por sus redes sociales que el predio le fue cedido por la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).

        Qué expeditiva estuvo la AABE en este caso!!!

        Por supuesto, rápidamente surgieron los argumentos municipales: las tierras desde las vías hacia el río están abandonadas. Sin embargo, los estudiantes señalaron lo contrario: “Esas tierras nosotros las usamos para hacer actividad física, ahí tenemos una cancha de rugby, una pista de atletismo, tres canchitas de jockey”. Y específicamente sobre la franja que da sobre el río Luján, Arián explicó: “Para nosotros las actividades de campamento son muy importantes, por eso necesitamos espacio verde y ese lugar tiene las características apropiadas para nuestras actividades”. Es decir que la selva ribereña, en su estado silvestre, es utilizada por los estudiantes.

        Según dicen desde el Municipio, hacía años que venían realizando trámites para obtener las 10 hectáreas que son posesión de la Universidad Nacional de Luján desde 1993. Según dicen, también, siempre tuvieron un proyecto para hacer una reserva urbana. Evidentemente, querían dar una sorpresa, ya que jamás lo expresaron ante la prensa local. Por el contrario, en junio de 2018, durante una actividad en la quinta El Ombú por el Día Mundial del Ambiente, la Secretaria de Salud Pública, Alicia Aparicio, anunció que estaban proyectando una reserva urbana de una hectárea donde recrearían el paisaje deltaico. La misma información dio a esta periodista el Director de Área de Investigación y Cuidado de Recursos Naturales, Gabriel Tato, en septiembre del mismo año, informando que sería al lado del nuevo destacamento de Bomberos y que la inaugurarían antes de diciembre de 2019. Esta reserva no se concretó y de la reserva urbana que supuestamente quieren hacer en las tierras de la Universidad Nacional de Luján, jamás hablaron. Qué raro!!

        Las reservas naturales urbanas tienen como objetivo el resguardo, conservación y, si es necesario, restauración de paisajes naturales, pero nunca la realización de playones deportivos. Conservar esa franja de tierra en su condición silvestre es esencial y eso es justamente lo que se disfruta: la naturaleza en su estado más natural posible. Resulta llamativo que la AABE exprese en su Resolución 43/2020 que se otorga el predio “a los fines de ejecutar la obra de construcción”, ¿qué obra de construcción? Una reserva natural no necesita ninguna obra de construcción. Como dijo Luis Freitas a Infobae, este es un pulmón verde que debe ser preservado. Para todos los vecinos que supuestamente estaban esperando esta noticia, hay que recordar que el predio se encuentra entre un barrio cerrado y una marina que ya gozan del beneficio del pulmón verde. Es una pena que el Municipio de San Fernando no piense en planificar una reserva urbana donde es necesaria, por ejemplo en las barriadas de Virreyes. Hasta ahora, la Universidad Nacional de Luján ha cuidado muy bien de ese pulmón verde.

        Aparentemente el nuevo director de la AABE y el Municipio de San Fernando han entrado en razones, por lo cual habrían iniciado conversaciones con la UNLu que estaría dispuesta a recibir ayuda económica del Municipio de San Fernando, pero jamás a ceder las tierras que le pertenecen desde 1993. “En el Consejo Superior tenemos claro que el predio es nuestro, si el Municipio nos quiere hacer una cancha, que la haga. Esperamos además que el Ministerio haga todos los trámites que le corresponden”, recalcó Arián.

        Como ya se dijo, los trámites que le corresponden al Ministerio de Educación de la Nación es la subdivisión de la Casona del Ministro. Según nos explicaron, esto significa que el Ministro tiene esa casa para su uso, “sería como la quinta de Olivos”. ¡Qué idea tan cortesana y oligárquica que un Ministro de Educación tenga una casa para su solaz! No estamos en época de virreinato, ni en la Rusia zarista. Estas herencias de épocas oligárquicas deben ser desterradas definitivamente. Si tenemos un Presidente de la Nación que conduce su propio auto hasta su lugar de trabajo, el actual Ministro de Educación debe renunciar al privilegio de tener una casa quinta para su disfrute. Los estudiantes de Educación Física necesitan más espacio para el dictado de sus clases, por lo cual sería un gesto democrático que esa Casona, con los jardines que la rodean, se transfiera a la Universidad de Luján. Los únicos privilegiados, en este conflicto, deben ser los estudiantes.

Por Mónica Carinchi

Un ataque contra toda la Universidad Nacional de Luján: por la defensa de la sede San Fernando

        En los últimos días se conoció públicamente que el gobierno municipal de San Fernando, encabezado por su intendente Juan Andreotti, y el Estado Nacional avanzan conjunta y firmemente para quitarle una parte del predio a la Universidad Nacional de Luján en su Delegación situada ese municipio bonaerense. Estas acciones constituyen un gravísimo ataque contra toda la comunidad de la UNLu y contra toda su riquísima historia en defensa de la educación universitaria pública y gratuita.

        Se trata de un predio de 9.75 hectáreas, lindante con el Río Luján, que desde hace décadas es utilizado cotidianamente por los miles de estudiantes que cursan sus estudios en el Profesorado Universitario en Educación Física (PUEF). También este “espacio verde” es utilizado regularmente por diversas organizaciones barriales, comunitarias y educativas de la zona.

        Por su ubicación estratégica el predio de la UNLu se configura, desde hace varias décadas, como un muy preciado botín para los agentes y especuladores inmobiliarios, quienes hacen grandes negociados a través de la utilización y privatización (abierta o encubiertamente) de tierras públicas.

        En el año 1993 se firmó un convenio entre el Ministerio de Cultura y Educación de la Nación  y la Universidad Nacional de Luján, mediante el cual se transfirió a la UNLu el Instituto Nacional de Educación Física “Gral. Manuel Belgrano”. Es decir sus servicios académicos, el personal docente y no docente y todos sus bienes e instalaciones fueron transferidos a la UNLu. Luego, en el 2007 se firmó un nuevo “Contrato Programa” entre la UNLu y el Ministerio de Educación de la Nación que apuntaba a resolver “las cuestiones pendientes” del acuerdo de 1993. Allí, como uno de los puntos centrales, las partes asumieron el compromiso de “concluir la subdivisión del predio y la escrituración del mismo a favor de la UNLu”.

        Sin embargo, el pasado 20 de mayo las y los integrantes de la universidad nos anoticiamos por las redes sociales que el propio intendente de San Fernando, Juan Andreotti, junto a las autoridades de la Agencia de Administración de Bienes del Estado y fuerzas de seguridad ingresaron sin autorización y en pleno aislamiento obligatorio al predio de la UNLu en San Fernando.

        Horas más tarde desde el portal oficial del municipio de San Fernando se dio a publicidad que el “intendente de San Fernando firmó un convenio con el Presidente de la Agencia de Administración de Bienes del Estado, Martín Cosentino, y su Vicepresidente Juan Debandi donde se otorga al Municipio 9,75 hectáreas de terrenos abandonados que pertenecían al Estado Nacional”. Además la noticia aclaraba que se trata de “terrenos pertenecientes al Ministerio de Educación”.

        Este convenio fue oficializado a través de la Resolución 43/2020 de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (Boletín Oficial de la República Argentina, 21/5/2020). También el Concejo Deliberante de San Fernando “convalidó el convenio de uso alcanzado entre la Agencia de Administración de Bienes del Estado y el Municipio, para la creación de una Reserva Ecológica Educativa” (29/5).

        Un párrafo especial merece el absoluto silencio cómplice de las máximas autoridades del Ministerio de Educación de la Nación y del propio titular de la Secretaría de Políticas Universitarias, Jaime Perczyk quien es docente en la sede San Fernando de la UNLu.

Las respuestas de la UNLu

        Conocidos los hechos del 20 de mayo la respuesta por parte de estudiantes, docentes, graduados, sindicatos y autoridades de la universidad fue inmediata. En las redes sociales, portales y foros el rechazo y el repudio fueron masivos. En ese marco se realizaron dos asambleas interclaustros (22 y 29/5) donde el repudio a la acción realizada por el gobierno municipal fue unánime y contundente.

        Por su parte, el miércoles 27 se reunió de manera extraordinaria el Consejo Superior para tratar este tema. Allí por unanimidad se resolvió “repudiar el accionar del Municipio de San Fernando” e “instar al Ministerio de Educación de la Nación el inmediato cumplimiento de sus obligaciones convencionales pendientes para el perfeccionamiento de la transferencia del predio afectado a la UNLu”.

        Por todo el expuesto es claro que estamos en presencia de un hecho escandaloso y aberrante que merece todo el repudio de la comunidad. El reclamo unitario es exigir la inmediata restitución de esas tierras a la UNLu. Para eso es imperioso que se desarrollen todas las acciones legales y directas necesarias, en una lucha de todos y todas para defender a nuestra querida Universidad Nacional de Luján. ¡La UNLu y el PUEF no se tocan!

Por Patricio Grande (Docente UNLu)

DNI 28.179.165