Una muestra de abstracción geométrica en el Museo Casa Sarmiento. La artista plástica Verónica Di Toro expone 10 obras de 50 x 50. La clave de estas obras: el color. La muestra, con visitas guiadas, se puede visitar hasta el 5 de marzo.

        Muchos artistas plásticos se ven atraídos por los paisajes deltaicos, generando cuadros más o menos figurativos; otros se sienten convocados por el espacio alejado del mundanal ruido que les permite entrar en un estado de cuasi meditación favorecedor de su proceso creativo. “Hay algo que tiene que ver con un estado de concentración que necesito para pintar que en la isla me sucede mucho mejor que en Buenos Aires”, resaltó Verónica Di Toro, quien exhibe su obra Cuadrantes en el Museo Casa Sarmiento hasta el 5 de marzo.

        Hace casi 20 años, Verónica pasa sus fines de semana -y siempre que puede temporadas más extensas- en la zona del arroyo Santa Rosa, en la primera sección del delta de Tigre. “Por temas laborales sigo radicada en Capital, pero tengo mi corazoncito isleño”, confesó. Por esto se alegró cuando desde el área de Cultura le propusieron hacer la muestra en el Museo Casa Sarmiento, donde expone 10 obras, de 50 x 50, que repiten una misma estructura geométrica, en tanto lo que varía es el uso del color.

        Las paredes del museo no son lisas, son tiras de maderas que forman rectángulos. “A la hora de colgar allí mis cuadros me vi con un desafío. Jugué con las direcciones que ya me proponía la pared y ubiqué los cuadros en función de eso. Quedó muy bien”, sostuvo Verónica, que agregó: “Esta serie que muestro tiene mucha fuerza, todo es simétrico y muy potente. No todos mis trabajos tienen esta misma dinámica”.

Sutiles diferencias

        “No hay nada específico que me permita decir que tal cosa de la isla la represento con esta geometría. Para mí es un espacio inspirador más allá de que no plasme una imagen mimética”, dijo Verónica Di Toro, quien, desde hace más de 20 años, transita el camino de la abstracción geométrica.

        Algunas de sus obras destacan las franjas, otras las diagonales; actualmente está trabajando con el cuadrado. La muestra del Museo Casa Sarmiento se llama Cuadrantes, nombre en el cual se conjugan la figura geométrica del cuadrado y los ejes cartesianos que se usan en brújulas y sextantes. “Me gustó jugar con las palabras respecto a los sistemas de ubicación en el espacio”, refirió la entrevistada.

        En cuanto a la estructura básica de estas obras, así la describió: “Un eje vertical y otro horizontal en el medio, el eje cartesiano. Después hay subdivisiones del cuadrado que van alrededor y cuatro esquinas que para mí serían los puntos cardinales. En algunos cuadros esas esquinas son del mismo color, en otros hay dos esquinas de un color y dos de otro. La idea es que el ojo circula por ese movimiento de las esquinas respecto del centro”. En síntesis, simetría en las líneas y quiebres en el color.

        En los colores, entonces, hay una clave. Di Toro expresa que los relaciona intuitivamente y que va utilizando distintas paletas según épocas. “Más allá de la estructura geométrica que se repite, en el color voy encontrando sutiles diferencias. Me gusta meterme en la cocina de los colores, en la relación de un color y otro cuando se ponen juntos, ver cómo funcionan para el ojo. Pienso que ahí sucede la obra”. Para probar combinaciones aprovecha los formatos pequeños, como los que se aprecian en este caso.

        En el inicio de su proceso creativo empuña lápiz y regla porque las medidas no son a ojito; después encinta cada espacio y comienza a dar las manos de color, que serán más o menos según la capacidad cubritiva de cada uno. Una vez que está todo planteado, va haciendo los retoques. “A veces en las últimas manos hago una modificación porque me doy cuenta que un color tiene que estar más claro o más oscuro, más cálido o más frío. Voy ajustando como cuando se afina un instrumento”. Así se van armando armonías y disonancias, porque busca que “siempre haya algo que llame la atención o genere alguna pregunta. Que haya algo discordante, pero también zonas de descanso para el ojo”.

        Verónica Di Toro expuso en el Centro Cultural Recoleta, Galería Alberto Sendrós, Fundación Proa, en el Centre Regional D’Art Contemporain, en Francia; también en Salta, Santa Fe y distintos museos de la provincia de Buenos Aires, especialmente en el Centro Municipal de Arte de Avellaneda, donde además es docente. Para conocer toda su obra www.veronicaditoro.com.ar

Por Mónica Carinchi