Una grúa municipal rompió un caño de AYSA. Los vecinos reclamaron a la delegación y también a la empresa conducida por Malena Galmarini y “nadie se hacía cargo”, dijo una vecina.

        Ricardo Rojas está aproximadamente a 10 kilómetros del centro de Tigre. Es seguro que ninguno de los nuevos habitantes de los edificios que se levantaron alrededor del palacio municipal saben de la existencia de esa localidad. Seguramente no saben que pasaron 3 días sin agua, pero como los vecinos de Ricardo Rojas se sienten parte de Tigre, se comunicaron con este medio para no sentirse tan abandonados.

        Una grúa municipal, que está haciendo una “limpieza” sobre el arroyo Las Tunas, rompió un caño maestro de AYSA. “El maquinista no tiene la culpa”, dijo un vecino, “tiene que haber dos obreros sobre el puente para que le indiquen porque allá el tipo no puede ver bien”.

        Pero los obreros no estaban y el caño se rompió y los vecinos comenzaron a reclamar a la delegación y a AYSA y pasaron los días y “se tiraban la pelota unos a otros y nosotros sin agua”, comentó una señora.

        ¿Por qué estaba esa grúa allí? “Están limpiando el arroyo”, respondió un muchacho. ¿Limpiar es sacar la vegetación que evita que se desmoronen las riberas? ¿Limpiar es sacar los barros del cauce, evidentemente contaminados, y dejarlos al costadito, en la calle? Esta removida del cauce, ¿es lo que generó que el río Tigre estuviera negro y los peces murieran en el Luján, cerca del canal aliviador, esta última semana?

Por Mónica Carinchi