Armar jardines para que vuelvan las mariposas

, Medio Ambiente

Delicadas y frágiles, las mariposas sobrevivieron a los dinosaurios. Sorprendentes por su diversidad, tamaño y colorido, muchas especies están en peligro de extinción, entre ellas la bandera argentina.

 

Plantas e insectos tienen una estrecha relación desde hace millones de años, ya que abejas, polillas, avispas, mariposas son agentes polinizadores de muchas especies vegetales. Este mecanismo – la polinización – es una inteligente estrategia que permite al reino vegetal asegurar su dispersión sobre amplios espacios, ya que las plantas no pueden moverse. Al mismo tiempo, el néctar es, en algunos casos, el único alimento de los insectos. Por este motivo, si desaparece una planta, desaparece también una especie animal.

 

Madame mariposa

Mariposas y polillas pertenecen al orden lepidoptera, que cuenta con 150.000 especies en todo el mundo. Las especies adultas viven del néctar de las flores, mientras que las larvas se alimentan de hojas, o sea que – al tener larvas vegetarianas – las mariposas tienen una asociación directa con las plantas autóctonas, que han sido durante décadas remplazadas por especies exóticas. Este hecho, sumado a la creciente urbanización, que arrasó con los terrenos baldíos – espacios propicios para la propagación de mariposas – y el uso de plaguicidas en jardines privados y espacios públicos han hecho que las mariposas desaparecieran de la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores. A esto hay que agregar la destrucción de los ambientes silvestres provocada por las urbanizaciones cerradas, que se han instalado en el Gran Buenos Aires, quebrando los corredores biológicos.

La diversidad y densidad poblacional de mariposas son un indicador biológico de la calidad del medio ambiente que habitan.

Para que las mariposas vuelvan, hay que plantar especies autóctonas con flores de abundante néctar, ricas en coloración e intensa fragancia. Algunas de estas plantas son: chilca de olor (por sus flores muy perfumadas atrae a diversas especies, por eso también se la conoce como mariposera); pasionaria; flor de patito; anacahuita; sen del campo; carqueja; achira; clavel del aire; coronilla, la planta nutricia de la mariposa conocida como “bandera argentina” que está en vías de extinción.

Preparar un jardín para que sea hábitat de mariposas es ayudar a la preservación de esta especie animal que sobrevivió a los dinosaurios. ¿Le permitiremos seguir viviendo?

 

Para seguir con el tema y ampliarlo, podés visitar: proyectopanambi.blogspot.com; www.mundobutterfly.com.ar; jardineriadeguerrilla.blogspot.com Como habrás visto, hablar de mariposas implica hablar de plantas nativas, por lo cual podés hacer un curso en la Reserva Natural Ribera Norte, de San Isidro.

Deja una respuesta