San Fernando. Las obras se realizan en la hoya existente entre las calles Carlos Casares, Malvinas Argentinas, colectora Sánchez y Acceso Norte, destinadas a evitar anegamientos en las calles a causa de las lluvias intensas. Santiago Aparicio, presidente del Honorable Concejo Deliberante, adelantó que se planea construir dos reservorios más, más dos en terrenos de la empresa Fate.

        Para prevenir los problemas de anegamiento generado por grandes lluvias cada vez más frecuentes, el Municipio sanfernandino encaró un plan de obras hidráulicas para retener el agua.

        En ese sentido, el Presidente del HCD de San Fernando, Santiago Aparicio, explicó que “a partir de las grandes lluvias que cayeron el año pasado y este año, el Municipio empezó a trabajar en la construcción de reservorios para evitar que el agua llegue a la casa de los vecinos y de a poco comenzamos a evaluar lugares trabajando estratégicamente con los ingenieros hidráulicos”.

        Puntualmente en la hoya existente entre las calles Carlos Casares, Malvinas Argentinas, colectora Sánchez y Acceso Norte, Aparicio explicó que “aquí estamos haciendo un reductor de caudal del agua que viene desde Villa Adelina, San Isidro, entra en la hoya y pasa por los conductos por debajo de Carlos Casares y Avellaneda, llegan a la ex Ruta 197 y terminan en la estación de Bombeo Nº 7. De este modo, reducimos el caudal de 2 bocas de 2 metros de diámetro del caño original y lo llevamos a 35 cm. para que siempre tenga el caudal regulado, con o sin lluvia”.

        Entre la intersección de Carlos Casares y Acceso, el reservorio de 900 m. de largo, 80 m. de ancho y 2,50 m. de profundidad, retendrá un volumen de agua de lluvia muy grande, que recibirá agua de ambos lados de la vía. Esa agua, al correr naturalmente hacia la ex Ruta 197, desborda los zanjones afectando a los barrios cercanos a la colectora, como el barrio La Esperanza que recibe mucha agua que baja desde San Isidro hacia la 197.

        En paralelo, el legislador informó sobre la nueva inversión municipal con la compra de 4 camiones desobstructores para destapar las 5.000 alcantarillas del distrito. “Estamos destapando además todos los tubos centrales de desagote sobre las calles Avellaneda, Garibaldi, Pasteur, que hace por lo menos 30 años que no se limpiaban, que desembocan en el zanjón Fate y de allí van a la Estación de Bombeo Nº 8. Lo que queremos lograr es reducir el caudal de agua que cae en los primeros minutos y que la gente no pase ningún inconveniente”, agregó, puntualizando en otros trabajos que también realiza la Comuna.

        Aparicio detalló acerca de la obra, que “esta es la última etapa, en 3 o 4 días más se saca el encofrado, y la obra estará finalizada. Este es un trabajo que hace el ingeniero hidráulico que trabaja conjuntamente con nosotros y con Autopistas del Sol. Tratamos que, por el gran caudal de agua, la gente no pase lo que hasta ahora estuvo pasando. Cuando caen muchos milímetros en pocos minutos, las alcantarillas se saturan y el agua queda sobre el asfalto. Lo importante es que no llegue a las casas de los vecinos y que los conductos estén limpios y las estaciones de bombeo funcionen como deben”.

        Otro anuncio importante tiene que ver con la reunión entre funcionarios del Municipio con la empresa Fate. Habrían acordado que la empresa construya una zanja de guarda y dos reservorios para mantener el agua que baja hasta la calle Pasteur dentro de su terreno para luego despedirla de a poco al zanjón Fate.

        “Otro reservorio que estamos haciendo es en el barrio Villa Jardín, para que el agua no entre al zanjón Fate. Y otro reservorio que estamos estudiando está entre el cementerio Israelita y el río Reconquista, donde estamos trabajando también con nuestras máquinas para lograr otro reservorio. Siempre estamos tratando de darle soluciones al vecino de nuestro partido”, concluyó Aparicio.