Se inicia un proceso de redistribución equitativa de la coparticipación federal: Un punto más para la provincia

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El Presidente Alberto Fernández creó el Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires. Priorizando la calidad de vida de los bonaerenses, se le resta un punto de coparticipación a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la ciudad más rica del país.

        Algunos han puesto en discusión la modificación del coeficiente de coparticipación federal que recibe la ciudad de Buenos Aires. Por supuesto, lo hace la oposición al gobierno nacional, sin recordar que Mauricio Macri determinó, por decreto (como fue su costumbre) el aumento de la coparticipación para CABA en 2016.

        La coparticipación de impuestos es una ley del año 1988. En ella se establece que el Poder Ejecutivo, es decir el Presidente de la Nación, tiene la ATRIBUCIÓN de determinar, de la parte que le corresponde a Nación, el coeficiente de participación para la ciudad de Buenos Aires.

        “Luego, por decreto 705/2003, se determinó que la participación que le corresponde a CABA se fijará a través de un coeficiente de 1,40% del monto total recaudado”, explicó el Dr. Jonatan Baldiviezo, presidente del Observatorio del Derecho a la Ciudad.

        Así fue hasta que, el 18 de enero de 2016, es decir 39 días después de haber asumido como presidente, Mauricio Macri llevó el coeficiente de coparticipación para CABA al 3,75%. “El aumento se justificó por la transferencia de competencias”, aclaró el Dr. Baldiviezo.

        Esto último se refiere al traspaso, a la ciudad autónoma, de los agentes de la policía federal que ya actuaban en CABA.

        El 19 de enero de 2016, Ámbito Financiero informaba: gracias a este aumento, CABA recibiría $26.845 millones, en tanto el gasto por el traspaso de los agentes policiales sería de $11.000 millones; o sea que a Larreta le quedó un restito.

        El Dr. Baldiviezo, que realiza un trabajo constante sobre problemáticas de la CABA, recordó que, en 2017, “se firmó el Consenso Fiscal entre Nación, Provincias y CABA, donde se asumió el compromiso de votar una nueva ley de coparticipación federal de impuestos que aún no se votó y, además, el Estado Nacional se comprometió a reducir el porcentaje de coparticipación de la CABA, de forma tal de mantenerla en condiciones de igualdad con el resto de las jurisdicciones”.

        Nuevamente en 2018, por decreto 257, Mauricio Macri redujo el coeficiente de CABA un 0,20%, quedando en 3,50%.

        O sea que fue el presidente Mauricio Macri quien modificó por decreto, en dos oportunidades, el coeficiente de coparticipación de la CABA. Para que no queden dudas, el presidente del Observatorio de la Ciudad explicitó: “Históricamente la modificación del coeficiente de participación de la CABA se estableció por decreto del Presidente. Y como no se votó una nueva ley, continúa vigente el mismo sistema, competencias y formas para modificar el coeficiente de participación de la ciudad autónoma”.

        En relación a los decretos de 2016 y 2018, Baldiviezo recalcó que “se orientaron a financiar las funciones de seguridad pública, pero la incidencia presupuestaria de los coeficientes adoptados en aquellos años no condice con las necesidades reales del objetivo”. Efectivamente, haciendo cuentas, el gobierno nacional advirtió que la compensación que recibió la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por hacerse cargo de la policía federal, se excedió en un punto.

        Efectivizando lo que ya le había anticipado a Rodríguez Larreta, por decreto 735/2020, el Presidente Alberto Fernández fijó el coeficiente de participación para CABA en 2,32%, pasando, entonces, un punto al Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires como “distribución equitativa y solidaria de los recursos, priorizando la calidad de vida e igualdad de oportunidades”. En el mismo decreto se informa que, en 2019, el presupuesto per cápita de CABA era de $106.472, mientras que en la Provincia de Buenos Aires era de $53.509. Sin dudas, la CABA no verá resentidos sus fondos por un punto menos de coparticipación sobre todo si, en lugar de rehacer veredas que están en perfecto estado, dispone racionalmente de sus recursos.

Por Mónica Carinchi

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