El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación continúa trabajando en el distrito de Tigre, a través de las distintas estrategias de intervención como el Programa Ingreso Social con Trabajo “Argentina Trabaja” y “Ellas Hacen” a los fines de generar inclusión por medio del trabajo. También se realizan numerosas acciones más focalizadas.

El Programa “Ellas Hacen” está destinado a mil mujeres de todo Tigre que se encontraban desempleadas o en situación de alta vulnerabilidad y tiene el objetivo de organizarlas en cooperativas para trabajar en el mejoramiento de sus barrios.

Luego de meses de capacitación, durante el mes de abril, se conformaron 35 cooperativas de trabajo que están integradas por un poco más de mil mujeres. Están distribuidas en diferentes localidades y barrios de Tigre, y por ejemplo, en el caso de Don Torcuato, se conformaron seis que recibieron los siguientes nombres: “Unión y Fuerza”, “El Progreso”, “Las Buenas Muchachas”, “La Unidad” “La Lealtad” y “Evita”.

Las integrantes de las cooperativas trabajarán en el mejoramiento de sus barrios, se podrán capacitar en oficios y terminar sus estudios primarios o secundarios. Se brinda además el acceso al Monotributo Social, lo que garantiza una obra social y aportes para una futura jubilación; el cobro es por tarjeta bancaria personal, sin intermediarios y con posibilidades de capacitación en otras tareas.

Entre las primeras actividades desarrolladas por las trabajadoras del programa “Ellas Hacen”, se encuentra la remodelación de 40 establecimientos educativos, entre los que se encontraron escuelas primarias, secundarias, jardines de infantes, centros de formación profesional y sedes del programa FinEs (programa de terminalidad educativa).

Entre las actividades de capacitación que realizan las integrantes del programa, a fines de abril han participado de talleres sobre salud integral organizados por la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia. Los cursos comenzaron en marzo y se extienden hasta mayo, se abordan temas como nutrición y organización familiar desde un enfoque de derechos y se fomenta una alimentación saludable en la vida cotidiana de las personas.

Por otro lado, durante los meses de marzo y abril, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, entregó más de 4.500 guardapolvos a distintos establecimientos educativos como la Escuela Nº 10 de Las Islas, la Escuela Nº 28 de Don Torcuato, la Escuela Nº 34 de Carupá, la Escuela Nº 47 de La Paloma, entre otras.

También se continúan realizando controles oftalmológicos por medio de los cuales más de 4 mil vecinos y vecinas de Tigre han podido acceder a chequeos oftalmológicos y recibieron lentes de manera gratuita en el club San Justo de la localidad de Benavídez. Además, pudieron realizarse controles médicos en los Centros Integradores Comunitarios Móviles. Estos espacios, dispuestos por el Ministerio de Desarrollo Social, cuentan con una capacidad de atención de más de 50 personas diarias. Allí, se realiza el diagnóstico y la confección de lentes en el acto; y se brindan servicios de vacunación, médicos clínicos y pediatras.

Convocatoria Nacional de Murales Colectivos

Entre los días 4 y 12 de abril, más de 50 personas entre cooperativistas, vecinos, jóvenes y niños del barrio los Troncos del Talar pintaron un mural junto al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. La pintura fue plasmada en el paredón de la entrada del barrio Sagrada Familia, ubicado en la esquina de avenida Juan B. Justo (ruta 197) y Sargento Cabral.

Durante la primera jornada, los participantes elaboraron el boceto colectivo. Una vez terminado, se proyectó sobre la pared elegida a fin de dimensionarlo y dejar planteado el dibujo para ser pintado durante el próximo encuentro. El resultado fue un trabajo artístico colectivo de identidad local.

El mural se confeccionó a partir de dibujos que nacieron de los relatos de los vecinos. El tema principal fue la historia del barrio, hoy llamado Sagrada Familia y antes conocido como Villa El Indio. La llegada de las comunidades paraguaya y peruana cambiaron el lugar, se mejoraron las casas, y los vecinos crearon un club para niños, niñas, una canchita de futbol y espacios centrales del barrio para contener a los jóvenes.