Movimiento Solidario Rincón. Organizan cenas, peñas, festivales para niños, aunando la colaboración de comerciantes y vecinos y el esfuerzo de los integrantes de la comisión directiva, encabezada por Roberto López.

Roberto López (43) nació en un barrio humilde de Rincón, con el tiempo adquirió un carácter amable y cordial que le permitió contactarse amigablemente con cuanta persona conocía. Se fue interesando por la tarea social y en el 2008, junto a varios vecinos, armó Movimiento Solidario Rincón, institución de la cual es presidente.

“Me gusta patear los barrios”, dice el dirigente que va caminando y en cada cuadra se detiene a conversar para tratar de solucionar los problemas que le plantea la gente.

Aunque su inserción social le permitió acceder a una banca de concejal, no reniega de su origen humilde y recuerda que tuvo que “renegar con la política anterior”, por eso basa su trato “en la confianza, de igual a igual”.

Volver a unir

“Todos los que están en la comisión son personas humildes, pero tienen muchas ganas de ayudar”, comenta Roberto. La tarea que realiza la institución que preside apunta a esas pequeñas cosas que mejoran el día a día.

En vacaciones de invierno y verano proyectan cine en los barrios: “Cortamos la calle, ponemos sillas, pochocho, gaseosas y todos pasamos un buen momento”. Para la organización de estas actividades cuentan con los vecinos que “son personas que tienen ganas de salir adelante”, asegura.

Todos los años hacen una cena de fin de año: “Juntamos vecinos, instituciones y agasajamos al que menos tiene. Cobramos una entrada muy económica, pero hacemos la mejor comida, para que los vecinos la pasen bárbaro. También es una manera de volver a unir a la gente”.

Cada vez que realizan una cena, fiesta, peña, empiezan a circular las rifas y los pedidos de colaboración, porque “el Movimiento Solidario no tiene un mango, pero yo armo una fiesta para 1700 pibes con todo donado”. Y, efectivamente, para el día del niño y la navidad – que se festejan en el Club Rincón – “los regalos no fallan”.

Hace muy poco hicieron una peña a beneficio de los jardines 917 y 924: “Vinieron 600 personas. Hubo cantantes, bufet. Siempre logramos un ambiente muy familiar. Juntamos más de 11 mil pesos. Una de las directoras me dijo ‘Roberto, nosotras a veces hacemos algo y no juntamos más de 300 pesos’. Pudieron comprar una tele, equipo de música. Estamos muy satisfechos”.

A todos aquellos que no tienen los recursos necesarios para hacer, por ejemplo el cumpleaños de 15, el Movimiento les presta manteles, vajilla, un horno pizzero, pero siempre “para esas personas trabajadoras que se esfuerzan para que sus hijos vayan a la escuela”, aclara Roberto que tiene ganas de cambiarle la vida a la gente y por eso apuesta a la educación.

Junto a él, la querida Coca – vicepresidente de la institución – también está siempre atenta a las necesidades de los vecinos: “Si es necesario, saca los fideos de su alacena para la gente que tiene menos”. Otra gran compañera es María Eugenia Masa, que “no tiene ningún parentesco con el intendente”, aclara Roberto. “Nos conocemos de chicos, trabaja codo a codo. En cualquier momento está en la comisión”. También Marcelo Marina, presidente del Club Rincón y concejal, forma parte del Movimiento Solidario Rincón.

Para hacer cada vez más por los vecinos, Roberto aspira a conformar un grupo de trabajo sólido y a tener el espacio propio. No cabe duda de que lo logrará.