A mediados de octubre abriría sus puertas el Centro de Inserción Social en Tigre centro

A paso redoblado marchan las obras de construcción del Centro de Inserción Social en Tigre centro, sito en Av. Cazón al 400, con salida también por calle Enciso. Será el primer refugio para indigentes en situación de calle.

Si bien estaba prevista su inauguración para los meses más fríos del año, todo indicaría que a mediados de octubre finalmente esté en funcionamiento en una primera etapa el edificio que cobijará a 60 personas. Habrá una segunda etapa para otras 70.

“Calculamos que alrededor del 15 de octubre estaría terminado el edificio. Será un lugar para la gente que está en la calle o no tiene donde dormir, será para cenar, dormir y asearse”, manifestó Alberto Vegnaduzzi, tesorero de la Fundación Tigre Crece, entidad que supervisa la obra realizada con fondos municipales, de empresas y de la misma Fundación.

El hecho que se haya demorado la apertura tiene que ver con que en principio, el lugar simplemente se iba a remodelar, pero al iniciarse las tareas, se decidió por reconstruir todo el predio. “En principio íbamos a hacer una remodelación sencilla, dada la necesidad que es muy grande de 60 personas que viven en las calles de Tigre, pero luego decidimos demoler lo poco que había y arrancar de cero. Se construyeron algo así como 600 m2 en esta primera etapa y queda una segunda etapa de otros 500 m2”, adelantó Alberto.

En esta primera etapa, además de dormitorios, habrá vestuarios, comedor, cocina, lavadero, éste último espacio se utilizará también para cambiarse la muda diariamente. Funcionará de las 19 horas hasta las 7 de la mañana siguiente. “A medida que lleguen, se van a bañar, se van a cambiar de ropa, comerán, se van a dormir hasta las 6 de la mañana y por último tendrán un desayuno”, aseguró Alberto, pero aclaró, “quienes no trabajen, deberán hacerlo o se intentará buscarlo con capacitación previa a través de la Agencia de Empleo (Municipal) para tratar de reinsertarlos a la sociedad, esa es la idea”.

Por estos días, el Municipio de Tigre tiene un registro de 60 personas en situación de calle, censadas a través de las cámaras de seguridad. Estos deambulan por la estación de trenes, debajo de los puentes y en cajeros automáticos.

Hoy son 60 pero una vez puesto en funcionamiento el centro, puede multiplicarse el número rápidamente. “La realidad es que este tipo de alojamientos hay uno solo en Retiro y por el momento no existe ninguno cerca, y al estar cerca del tren, de los colectivos, va a generar que gente de otros municipios traten de acercarse. Nosotros vamos a censarlos y habrá un reglamento de funcionamiento interno que va a generar la continuidad de la gente dentro del hospedaje. Para nosotros será una nueva experiencia, por eso iremos aprendiendo con el tiempo”, comentó Vegnaduzzi.

Para más adelante habrá otra etapa de construcción. Será sobre la losa de los dormitorios para instalar talleres y consultorios médicos.

La higiene y las buenas costumbres de los hospedados, será de suma importancia para conservar su permanencia en el centro. “Serán primordiales, la higiene, la conducta y sobre todo los horarios. La gente no va a entrar cuando quiere, habrá un horario de llegada y un cierre de la puerta en un determinado horario. La gente que no llegue a horario, no podrá ingresar”, anticipó Alberto.

Lo que en algún momento fue un ambicioso proyecto, de ver mejoradas las vidas de muchas personas que deambulan por nuestro distrito en total estado de vulnerabilidad, muy pronto y con la decisión de cada uno de ellos, podrían volver a reinsertarse en la comunidad. Será el deseo de todos.