Luego de dos años de intenso trabajo para lograr la autonomía del Delta, el Proyecto de Ley se encuentra en su última etapa preparatoria, listo para ser ingresado por la Mesa de Entradas de la Legislatura Provincial. Se prevé la incorporación de interesantes principios rectores para la gestión municipal.

La Comisión de Gestión del Delta, formada a tal efecto, se encargó de sumar aportes, realizar modificaciones y de organizar reuniones de debate y difusión para que el documento fuera debatido por distintos grupos de vecinos. Mas allá de los contenidos básicos de todo proyecto de ley, se contemplaron artículos a los fines de sortear los importantes problemas que tuvieron otros procesos autonómicos como es el caso de Lezama que llegaron inclusive a la Suprema Corte Provincial, algunos de los cuales aún se continúan dirimiendo en dichos estrados.

En algunos casos incluso, los municipios cedentes de las tierras asignadas a los nuevos partidos, prácticamente vaciaron a las nuevas autoridades de contenidos y bienes, colocando a la nueva administración en una compleja situación. Estos puntos fueron los que se tomaron en cuenta en el proyecto de ley de Autonomía del Delta, creándose por ejemplo una Comisión bicameral de seguimiento de las transferencias de bienes de rigor y una Comisión Vecinal de Transición, ambas trabajando en forma complementaria.

Principios rectores de gestión para el nuevo Municipio Delta

La norma contempla 24 artículos y uno de ellos incluye principios rectores de gestión del nuevo municipio, algo poco común en la práctica y que le otorgaría a los futuros responsables de administrar, las herramientas y el marco dentro del cual se contempla que lleven adelante sus acciones.

Estos son los principios:

ARTÍCULO 2.- Las autoridades del Municipio Delta regirán su gestión en un todo de acuerdo a los siguientes principios rectores:

Mantenimiento y promoción de la Identidad Isleña.

Mantenimiento del principio de Insularidad.

Mantenimiento del funcionamiento como Humedal, su dinámica, capacidad de carga y servicios ambientales.

Mantenimiento de la capacidad y reconversión productiva.

Modernización tecnológica administrativa.

Desburocratización.

Descentralización funcional y administrativa.

Gestión, presupuesto y control por resultados.

Calidad de servicio y cercanía con el vecino.

Acceso a la conectividad informática priorizando las redes digitales comunitarias.

Proporcionalidad del gasto del Concejo Deliberante respecto del presupuesto global del Municipio que por esta ley se crea.

Racionalidad de estructuras administrativas y plantas de personal acorde a las modalidades de prestación de los servicios.

Presupuesto y Planeamiento Participativos.

Mantenimiento de las condiciones de uso, ocupación, densidad poblacional, habitabilidad, productividad y actividades económicas, compatibles con lo establecido en los incisos precedentes del presente artículo.

En cuanto se tenga el estado parlamentario se dará difusión del texto completo de la norma.

“Como puede verse el proyecto de Autonomía del Delta avanza en forma innovadora sobre nuevas formas de gestión, sostiene la identidad del partido, procura mantener sus condiciones de humedal en funcionamiento, la conectividad, la reconversión productiva, entre otros considerandos que hoy no existen en el territorio insular, fuente de numerosos conflictos sociales, marginación, mala administración, entre otros problemas”, sostiene Fernando Del Giudice, uno de los promotores isleños del proyecto. Asimismo Del Giudice agrega que “las islas de San Fernando comprenden el 96% del territorio del distrito y para el caso de Tigre el 56%, sin embargo, a pesar que dichos municipios reciben coparticipación provincial mensual se la utiliza sólo en la fracción continental y nada en las islas donde las carencias son mayores, por ejemplo el 100% de la población isleña carece de agua potable y de cloacas, además de servicios muy deficientes de transporte público de pasajeros”.