Profesionalismo y buen gusto en Victoria

CALAMO, diseño digital con estilo

Desde hace 3 años, Silvia Bornacín – diseñadora gráfica – desarrolla su actividad en Simón de Iriondo 1131, Victoria. Ofrece una amplia gama de productos: desde souvenirs hasta diseño de imagen corporativa. Se la puede contactar a través de www.calamo.com.ar

Son cada vez más las personas y empresas que buscan transmitir mensajes visuales con un diseño personalizado, ya sea una invitación para un cumpleaños de 15, una tarjeta personal o una acción para fidelización de clientes. Para todo esto, Silvia Bornacín – diseñadora gráfica – tiene una propuesta original, pues en su empresa CALAMO se puede “encontrar todo lo que sea diseño gráfico, desde tarjetería, papelería comercial, regalos empresariales, souvenirs hasta diseño de imagen corporativa, siempre con un toque original. Nos gusta ofrecer productos que no se encuentran en cualquier lado. La gente viene acá para encontrar algo diferente”.

Como diseñadora, Silvia acompaña a sus clientes en el desarrollo del producto: “si se trata de un souvenir, lo primero que hacemos es preguntar por el estilo de fiesta, mostramos productos y después los vamos adaptando al gusto y al presupuesto del cliente”. Va surgiendo una variedad de posibilidades: chocolates personalizados, botellas con sales aromáticas, lápices grabados, cajitas, tazas. “Algo que gusta mucho son las etiquetas de bebidas; se copia la estética de la marca elegida y con esa estética creamos una etiqueta con el nombre de la persona agasajada”, explica Silvia y muestra una típica botellita de Coca que dice “Camila”; también se pueden observar botellas de Chandon y Luigi Bosca y Silvia aclara que “muchas veces, las botellas con la nueva etiqueta no son para regalar, sino para colocar en las mesas”.

Otro souvenir solicitado es “el que simula la tapa de un diario, pero toda la información es sobre la persona agasajada. A veces también se agrega algo importante que está pasando en el momento”, informa Silvia, con el símil del “gran diario argentino” en la mano y agrega que son los clientes los que llevan los textos y las fotos y ellos hacen el armado y la impresión.

Por CALAMO no sólo pasan cumpleañeras, también hijos que quieren agasajar a sus padres en las bodas de oro; abuelas que compran el libro-diario para el recién nacido; matrimonios que todavía no han puesto la firma delante del juez, pero ya tienen hijos, entonces “arman las invitaciones con dibujitos de sus chicos”, recuerda Silvia.

Por otro lado, el trabajo con las Pymes también es intenso. “Vamos acompañando el crecimiento de nuestros clientes”, dice la titular de CALAMO. Esta profesional tiene una extensa experiencia en comunicación, diseño y marketing, por esto “podemos dar un asesoramiento global. Hay muchas cosas que se deben tener en cuenta en el momento de salir a mostrarse. No nos quedamos sólo con la mirada del diseñador gráfico”, subraya y explica que hay un equipo de profesionales trabajando con ella, que se ha especializado en gestión de proyectos. “Toda empresa necesita una imagen pregnante con la que se sientan identificados. Para esto hacemos un trabajo de investigación previo, qué hay en el mercado, con qué empresas van a competir, el relevamiento de la empresa en sí, qué quieren mostrar, en base a esto se arma el diseño de un logo. Después esta imagen se aplica a todo lo que van a usar: cartelería, ploteado de vehículos, papelería, páginas web”, cuenta mientras va mostrando algunos trabajos, entre ellos, manuales de capacitación.

“Acá es posible encontrar algo muy refinado y tradicional y también cosas muy desestructuradas y artesanales”, dice Silvia Bornacín. Todo esto, sumado a su capacidad para asesorar con solvencia y delicadeza, podrá verse en la Exposición de Productos y Servicios para Bodas y 15 Años que se realizará en el Howard Johnson de Pilar el 12 de septiembre próximo.

Desde hace 3 años, CALAMO distingue la calle Simón de Iriondo 1131, en Victoria. Con seguridad, la gente de la zona se detiene ante su vidriera – muy atractiva-, pasa, pregunta y luego “vuelve, es absolutamente fiel”, dice, con satisfacción Silvia y, cuando su suave voz se apaga, permite que los ojos se posen sobre un cartel que dice “nos invade un espíritu creativo e innovador, lo plasmamos en nuestros productos y servicios”.

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